EL 25 de noviembre fue declarado “Día de la no violencia”, por la Organización Mundial de la Salud (OMS), por ser un problema que afecta a todos los sectores sociales del planeta y como parte de las acciones contra esta manifestación, el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas exige el respeto de todos los gobiernos, a los derechos de la mujer y el niño, en la Declaración Internacional de los Derechos Humanos.
La violencia puede manifestarse de diferentes formas como, entre cónyuges, hacia los niños, las féminas, los hombres, los discapacitados y los homosexuales; pero es difícil precisar un esquema típico, debido a que esta expresión, puede ser física o psíquica y ocurre en todas las clases, culturas y edades.
Cabe destacar que las personas que sufren estas situaciones suelen ocupar un lugar relativamente de mayor vulnerabilidad dentro del grupo familiar y en este sentido la violencia hacia los niños y las mujeres, estadísticamente revisten la mayor casuística.
Es el estado el que debe velar por la protección de las personas involucradas, mediante acciones concretas tales como la aplicación rigurosa de las leyes y demás normativas jurídicas, unido a la generación de espacios educativos, de contención e intervención comunitaria.
En Cuba se aboga por el rescate de valores y la plena igualdad de la mujer y el bienestar familiar, la Revolución Cubana no ha abandonado a ninguno de sus hijos y seguirá, trazando nuevos retos y horizontes, para el pleno desarrollo y bienestar de nuestras vidas, en lo económico, lo político y lo social.